domingo, 30 de octubre de 2016

LA META

En la vida, cuando uno decide empezar un proyecto, la base principal para que este salga bien, es tener claro lo que se quiere. Luego, hacer un estudio para poder llevarlo a cabo con éxito, y después, trabajarlo con rectitud y sin prisas para llegar a alcanzar la meta propuesta, ya que lo importante no es llegar cuanto antes, si no llegar con el proyecto conseguido.
¿Cual seria el mejor proyecto para la meta de nuestra especie?
Conseguir la perpetuidad de la raza humana.
¿Es posible eso?
Si.
¿Entonces, a que esperamos?
Ahí esta la cuestión. "Aque esperamos".
Como he dicho, para empezar un proyecto se tiene que tener claro lo que se quiere. Tienen claro la mayoría de ciudadano el proyecto deseado.
Si.
Seguramente, en la mente de casi todos esta esa meta de poder vivir una vida sana, sin penuria, con libertad y muy larga.
¿Tiene capacidad el ciudadano, para conseguir esa meta tan deseada?
Si.
¿Y porqué no la consigue?
Primero, por necio. Segundo, por cómodo, y tercero, por dejar su destino en manos de sus verdugos.
¿Que tendría que hacer el humano para lograr la meta deseada?
1º. Tener claro que lo quiere y 2º. Que puede llegar a ella.
¿Como?
Implicándose en ello.
Para que una obra no se derrumbe, ha de ser construida en terreno firme y con buenos cimientos, y
para que el humano pueda conseguir su mejor proyecto, ha de basarse también en ello.
El suelo firme y los buenos cimientos, son el pueblo mismo, y es por ahí por donde el ciudadano ha de cuajar su proyecto, ya que nadie mejor que el, con su propio sufrimiento y experiencia, es capaz de comprender lo que es bueno o malo para el.
El pueblo debe abrir los ojos de una vez, y comprender, que mientras el no tome las riendas de su destino, sus sueños no llegaran a la meta.
Esta demostrado, que ningún sistema de gobierno practicado, garantiza los derechos y seguridad del pueblo. Y el porque de ello, es que sus estructuras están construidas desde tejados. Los políticos y el poder están aposentados en su trono de cielo, y desde allí deciden el camino del proletario. Pero desgraciadamente lo que puede ocurrir hoy en estos casos, es que cuando una pieza desencaja de sus previsiones, el trono puede derrumbarse y todo irse al traste por no tener buenos cimientos.
Otro de los engaños mas dañinos para producir el caos al pueblo, es el "populismo". El se otorga ser la única representación del pueblo. Sin embargo, tras esa piel de cordero con la que se presenta, esta el dictador que pretende un régimen totalitario de opresión sin derechos ni libertad. Pienso, que hoy día los ciudadanos son bastante inteligentes para no caer en ese engaño, ya que cuando un sistema así se consolida, es aún más difícil que el pueblo pueda empezar su propio proyecto.
El día que el ciudadano se comprometa a empezar su futuro con un sistema "Perfeccionista", abra de hacerlo sin revoluciones ni vandalismos. Todos sus esfuerzos, abran de arraigarse en un cimiento firme y seguro como es el propio pueblo y desde ahí, ir creciendo en hermandad, libertad y justicia, ya que ese es el único camino que le permitirá alcanzar su meta.

                                                           J. S. T. Ciudadano del mundo 25 - 10 - 2016

lunes, 24 de octubre de 2016

LOS POLITICOS


La primera vez que un país empezó a gobernarse con políticos, seguramente creerían que seria un acierto, y en aquellos principios quizá pudo ser así, por que sus promotores seguramente lo harían con buenas intenciones, y pensando, que su esfuerzo seria esencial para conseguir un mejor futuro para el pueblo. Pero igual que pasa el tiempo, pasan también las ideas y experiencias, y gracias a ellas, se pueden juzgar los resultados buenos o malos que dejan.
Si miramos en general, la situación de bienestar que gozan los ciudadanos de nuestro planeta, nos damos cuenta de las grandes desigualdades que hay entre unos ciudadanos y otros. Esto demuestra, que los políticos no están a la altura para desempeñar sus cargos.
Cuando hablan de derechos humanos, a la gran mayoría de ciudadanos, se les niegan.
Mientras en zonas del planeta hacen destruir alimentos por intereses políticos, en otras, las gentes mueren de hambre por no tenerlos.
A todos se les llena la boca, cuando dicen querer terminar las guerras, pero todos las consienten y facilitan, fabricando y vendiendo armas.
Aseguran que todo ciudadano es libre. Pero levantan muros y alambradas en fronteras y no permiten que uno pueda escapar de conflictos y guerras para vivir en un lugar de paz.
Dicen, que todos los ciudadanos somos iguales ante la ley y tenemos los mismos derechos, pero la realidad en justicia, demuestra, que tanto tienes, tanto vales.
Los políticos son como los dioses. Tienen el corazón de piedra y no les afectan las miserias ni penas que sufre el pueblo.
Si a cualquier político le preguntaran, si estaría dispuesto a abandonar su formación, para integrarse en otra donde todos los esfuerzos y trabajos, estuvieran dedicados para conseguir hacer de nuestro mundo, un paraíso de paz y bienestar, te juraría que si. Pero seguro, que para quedar bien, añadiría que el y su partido es por eso por lo que están luchando, y si hay casos de corrupción, estos son por personas concretas y no por las instituciones.
Señores, si en todos los sistemas de gobierno, la corrupción puede acampar a sus anchas, es por que los políticos lo permiten.
Los políticos son quienes dictan las leyes, por lo tanto, son ellos los responsables y culpables de las buenas o malas leyes que tenemos.
Cuando uno decide voluntariamente trabajar en política por el bien del ciudadano, debe hacerlo sin escoger bandas ni color, ni defender o rechazar decisiones según quien las aya propuesto. Un buen político ha de estar dispuesto a dialogar, razonar y exponer bajo su punto de vista todo lo bueno y lo malo que podría producir una ley, y tras un debate con todos los responsables de crearlas, escoger la mejor, para que en ella no puede aflorar ni producirse, ningún acto que pueda burlarla.
Para que las instituciones funcionen bien, los políticos no devén tener egos. Y desgraciadamente la mayoría pecan de ello.
Me gustaría hacer tres preguntas.
¿Se puede creer y confiar en políticos tal como vemos que llevan el mundo?
¿Quien es el culpable de dejar el mundo en manos de políticos?
¿Si estuviera en tus manos, serias capaz de poner tu grano de arena para conseguir un mundo donde todos los ciudadanos fueran libres, iguales ante la justicia, y que cada uno se ganara el pan con el sudor de su frente?
Si tu primera respuesta es."NO", la segunda. "EL PUEBLO", y la tercera. "SI".Te diré que hace más el querer que el poder. Por lo tanto pueblo, no te quejes, en tus manos esta tu destino.

                                                        J. S. T. Ciudadano del mundo 17 - 10 - 2016

domingo, 9 de octubre de 2016

EL SER HUMANO

Si tuviéramos que hacer una calificación de los seres vivos que conocemos, sin-duda alguna, al ser humano lo calificaríamos como al Dios de todas las especies, ya que ha tenido la gran suerte, de ser el más especial entre ellos. Su conciencia le hace reconocer el bien y el mal, y su inteligencia es tan extraordinaria, que además de pensar, le permite razonar para que día a día pueda superarse en todo, y por ello pueda conseguir una vida más digna, libre y cada vez con más longevidad.
A pesar de tantos privilegios a su favor, al humano también podríamos calificarle como uno de los
seres más necios, ya que pudiendo llevar una vida tranquila con todo lo esencial y placentero, se deja arrastrar por egos innecesarios como acumular fortuna, que aveces, en vez de servirle para bien
le puede crear enemigos tan dañinos, que para robarle, no les importa matar-le.
¿Que tendría que hacer el humano, para reconocerle como el más especial e inteligente?
Demostrarlo con hechos. Y hasta que estos hechos no sean reales, el humano seguirá siendo necio.
¿Con que hechos puede demostralo?
Como todo, para que la empresa humana funcione bien, necesita tres buenas normas.
La primera, de derechos. La segunda, de obligaciones y la tercera, de justicia.
La primera de derecho, es reconocer que todos somos iguales. La segunda. Que el ser humano es un ser libre y nadie tiene derecho a esclavizar, imponer, chantajear o presionar para obligar-le a hacer actos que no sean por su propia voluntad. Y la tercera, que solo por a verle dado la vida y dejarle en este mundo sin su decisión, tiene derecho a recibir manutención, sanidad y una educación gratuita hasta su mayoría de edad. Por lo tanto, toda educación y ley, ha de ser en defensa de esos derechos.
La de obligación es la siguiente. Cuando un humano llegue a mayoría de edad, sera libre de decidir su propio futuro, pero también de ganar su sustento con el sudor de su frente, por que de una forma u otra, todo ciudadano esta capacitado para aportar un grano de arena para el bien de todos.
La tercera norma para un buen funcionamiento del sistema humano, es la de justicia, esta, ha de ser
justa a la ofensa o daño provocado, además, conocida de antemano por todos para saber que pena se impone a cada delito cometido. Un ciudadano puede perdonar la ofensa o daño que le haya causado otro, pero la justicia a de ser implacable y imponer al culpable la pena señalada para que este pague su ofensa o delito.
Es un imperdonable pecado, que con todo el conocimiento y sabiduría con el que goza hoy la raza humana, el ciudadano aún siga siendo esclavo de decisiones de poderosos que solo buscan su propio beneficio.
Para que al ser humano se le pueda calificar como inteligente y extraordinario, debe despertar de su irresponsabilidad y comodidad, y ser partícipe de decisiones sobre el bienestar y futuro de todos, ya que uno de los caminos más ciertos y seguros para que este pueda sobrevivir en el universo, es el de trabajar unidos con hermandad.
Si tratamos de visualizar el futuro del humano, veremos tres posibles metas. Una, la de su propia exterminación por irresponsables o por la desaparición de los sistemas estelares necesarios para el.
Otra, la que si el poder sigue dictando el futuro y destino del pueblo, dentro de pocos años, este hará desaparecer a toda la clase obrera sustituyéndola por robots, ya que estos le servirán fielmente sin pedirle cuentas. Por lo tanto, para que esto no ocurra, el pueblo ha de escoger la tercera que es la
de gobernarse con un sistema "Perfeccionista", ya que solo con el, el ciudadano puede llegar a ser dueño de su propio destino, y conseguir con su inteligencia, una vida digna y sin fin.

                                             J. S. T. Ciudadano del mundo 9 - 10 -2016