Sin duda alguna, una de
las propuestas importantes que tendrían que hacer realidad los humanos en
este principio de milenio, seria, lograr un mundo sin fronteras.
Si las aves, peces y
demás animales salvajes pueden desplazarse libremente por donde
quieren.
Porque la especie
humana, levanta fronteras para decidir hasta donde puede llegar un
ciudadano.
Un mundo de todos, debe
ser para todos. Los poderosos no son quien para levantar fronteras y
decidir donde devén vivir los ciudadanos, ni tampoco prohibirles a
que sean menos libres que los animales.
También es verdad, que
como ser inteligente que es el humano, sus pasos han de ser seguros.
El paso que se tendría
que adoptar para lograr este reto sin complicaciones, es muy fácil.
Solo seria cuestión,
de crear una tarjeta de identificación y control universal para cada
ciudadano, fuese del territorio que fuese.
Con este sistema,
ademas de integración de unidad, si alguien cometiera algún delito
y deseara cambiar su identidad por ser buscado por la justicia, su
camuflaje quedaría al descubierto y fallido en cualquier nación, ya
que si su nuevo personaje fuera inventado, no estaría reflejado en
el control de datos. Y si su cambio fuera por un personaje real, su
engaño podría ser descubierto en el instante de su comprobación.
La evolución del ser
humano hacia un estado de unidad, comprensión, bienestar y plena
libertad para todos, es evidente, pero los obstáculos que sus
gobernantes ponen para frenan la llegada a esa meta por que a ellos
no les conviene, niega a los ciudadanos de una rápida carrera hacia
ese bien.
Hasta que los
ciudadanos no sean lo bastante inteligentes, para unificarse en el
mundo en una sola nación por medio de una "Asociación
perfeccionista". Tendrán que seguir siendo esclavos del poder.
J.S.T.
Ciudadano del mundo 25-9-2015
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