Si analizamos los hechos que envuelven estos tiempos navideños de 2020, podemos comprobar, que será una de las peores navidades que la mayoría de ciudadanos podríamos desear.
Empezando desde el punto representativo de la Navidad, como “Paz en la Tierra a los hombres de buena voluntad” nos encontramos, que esa paz tan anhelada por la humanidad, ni está, ni en estas fechas se hace realidad . Miles de ciudadanos, arriesgando sus vidas, abandonan familiares y territorios, huyendo de guerras y miserias producidas por causa de egos de poder. Pero a estos hechos de éxodo obligado por guerras y miserias, se nos abren nuevas puertas de pesadillas y mortandad, como por ejemplo, este corona-virus, que extendiéndose con rapidez por todo el planeta. Hasta la fecha, nos deja unas cifras de 60 millones de infectados y 1.400.000 mil muertos.
Ante esta pandemia de tanta magnitud, sin el pueblo saber con certeza si es casual, o producida en laboratorio sin querer o por intereses de poder como ya se ha hecho en ocasiones, el crear virus para guerras, el pueblo no solo tendría que meditar los hechos, si no que tendría que afrontarlos y que le sirvieran para plantearse seriamente su futuro. Ya que podría suceder, que por un descuido durante una investigación de otro virus mortal, en un abrir y cerrar de ojos, la raza humana quedara extinguida.
¿ Como afrontar los hechos, perversos para el pueblo?
Con la única forma que el ciudadano puede afrontarlo. La de ser responsable de sus actos.
En la carta anterior titulada, “Diez verdades indiscutibles”, se puede ver, como por el humano no ser responsable, es culpable de todo el azote de sus desgracias.
¿ Como seria el ciudadano verdaderamente responsable?
Para que el ciudadano sea realmente responsable. Ante todo, tiene que tener claro, que nadie mejor que él puede garantizarle un estado de bienestar y paz. Luego, trabajarlo para hacerlo realidad.
¿ Como trabajarlo para conseguirlo?
El trabajo para conseguir el mejor estado de bienestar y paz para todos los humanos, es muy simple. Solo con la creación de una asociación ciudadana perfeccionista, para unir a todos los ciudadanos que no deseen vivir bajo el yugo de dictaduras, nacionalismos, comunismos y democracias engañosas, el pueblo, pasaría de ser esclavo del poder, a ser dueño de su propia decisión y futuro.
DIEZ VERDADES PARA EL BIEN DEL HUMANO
1 Defender por encima de todo, el buen funcionamiento del universo.
2 Trabajar por la unidad de todos los humanos.
3 Saber todos una misma lengua.
4 Las leyes, solo devén ser hechas y suprimidas por el pueblo.
5 Obligación al trabajo, para disfrutar de sustento, bienes y ocio.
6 Suprimir el dinero, para que el trabajo sea el capital.
7 Que todo se cobre y se pague, con control de identificación.
8 Gozar todos de libertad, en pensamientos y hechos.
9 Que la religión sea intima y no impuesta y adoctrinada en multitud.
10 Castigar la maldad, con la fuerza de su peso.
Con la creación de la asociación ciudadana perfeccionista, y empezar a defender-la- pacifica-mente, con la palabra y estas diez verdades, el pueblo conseguirá siempre paz en la Tierra, y cada Navidad.
J.S.T. Ciudadano del mundo 6 – 11 - 2020
